- Mirra - .

Frescura, recepción y transmisión.
Protector universal. Protección contra todo mal o daño que vayas a recibir. Meditación. Limpieza de personas y lugares. Potencia los rituales. Contra el mal de ojo, los hechizos y la brujería. Aleja energías negativas y malos espíritus.


Características

El aroma del incienso de mirra tiende hacia la espiritualidad y la virtud, a la visión interior y exterior de los distintos planos de conciencia, incidiendo en el trabajo y el servicio, en el deseo de ayudar a los demás, como si fuera un puente entre el espíritu y la materia.

Favorece

El trabajo, la dedicación, el esfuerzo, la diligencia, la traducción, la visión, la inteligencia visual y literaria, la fuerza del verbo, el valor de la palabra hablada y escrita, e incluso la racionalización de los aspectos espirituales de la existencia. También incide favorablemente sobre la armonía del ambiente, y sobre el acogimiento y el recibimiento, y, en suma, en todo lo que sea ayudar y agradar a los demás.

Depura

La torpeza, la desidia, la dejadez, las obsesiones de trabajo y de limpieza, el sacrificio inútil, la falta de oportunidades, la falta de metas, la falta de aspiraciones, la ignorancia y el desentendimiento. Aleja los malos humores y rompe con los egoísmos vanos. Abre las puertas de la visión y el entendimiento, alejando la infelicidad y la sensación de fracaso. Todos aquellos que tienen cargas espirituales deberían encender una barrita de incienso de mirra.

ANALOGÍAS

El incienso con aroma a mirra se relaciona mítica y místicamente con una serie de elementos mágicos que potencian el esparcimiento de su esencia por todos los rincones del cosmos.

Signo

El incienso mirra está especialmente vinculado al signo de Virgo, y a través de este signo proyecta sus valores de actividad, versatilidad, ingenio y desarrollo intelectual. Mantiene lazos de unión con los

otros signos de Tierra, pero apenas si se manifiesta a través de ellos. También mantiene una curiosa y difícil relación con Piscis en todo lo que se refiera a encierro y sacrificio.

Planeta

El incienso de mirra está conectado constante y continuamente con Mercurio, tanto en su aspecto de mensajero divino que trae y lleva mensajes entre el mundo material y el espiritual, como en el aspecto de la justicia divina que sabe interiormente que se ha de impartir tarde o temprano. No es raro, por tanto, que a veces el incienso de mirra lleve aparejado a su aroma la sensación de que el mundo espiritual es mucho más racional de lo que parece.

Salud

El incienso de mirra incide directamente sobre los intestinos, la maternidad, la fertilidad en general, el hígado, el vaso y el páncreas, es decir, sobre las visceras.

También ayuda a mejorar el tono muscular, a pesar de que poco o nada tiene que ver con la cultura física o el deporte.

La fuerza que otorga el incienso de mirra es más interna que externa y está más vinculada a los lazos espirituales que a los materiales, lo que no le impide ser un buen incienso preventivo de todo tipo de enfermedades. Por ejemplo, nos ayuda a llevar una vida más sana y una dieta más natural, alejándonos de los vicios y los excesos.

Rompe, por decirlo de alguna manera, con el apetito excesivo e irracional, ayudando al organismo a encontrar su propia forma y su propio equilibrio, por lo que más de una mujer asiática lo utiliza para adelgazar, aunque la idea de delgadez asiática no tiene nada que ver con la idea de delgadez occidental.

Dinero

Este incienso no está muy vinculado a los valores materiales, porque despierta más el ingenio para conseguir lo necesario, que el deseo de acumular, y funciona mucho mejor cuando se desea el bienestar material para otra persona, que para uno mismo.

Lo que sí favorece con fuerza es el trabajo y el empleo, ya sea de forma liberal o dependiendo directamente de otras personas, a la vez que rompe con las obsesiones económicas y el vicio de trabajar para matar el tiempo, o el vicio de no trabajar en absoluto.

Ayuda a conseguir ciertos triunfos en las áreas intelectuales, pero no ayuda a mantener dichos triunfos, ya que su vocación es de servicio y no de lucimiento personal. Eso sí, en todo lo que sea trabajar para ayudar a los demás, el incienso de mirra será un gran protector.

En suma, que no atrae a la fortuna, pero sí la estabilidad en el trabajo.

Amor

En el campo del amor estable y familiar el incienso de mirra es de gran ayuda, ya que impulsa a todos los miembros a vivir en armonía y al servicio de los demás. Por supuesto, favorece el amor entre padres e hijos, entre hermanos y hermanas, y entre marido y mujer, dándole constancia al cariño a pesar de las múltiples pruebas y problemas a que pueda verse sometido.

Muchas reconciliaciones por falta de entendimiento se pueden lograr a través del aroma del incienso de mirra, aunque no puede forzar a nadie a amar a quien en realidad no quiere.

Mejora cualquier clase de lazos afectivos, evitando que se conviertan en pesos o cargas para las partes, porque el incienso de mirra promueve la liberación total del espíritu sin tener que renunciar a los afectos. El amor maternal y paternal, por supuesto, tiene mucho que ver con este incienso.

Altar

El incienso con aroma a mirra quema mejor sobre soportes o incensarios de madera, y funciona mejor si el altar, una simple mesa o repisa, está orientada hacia el Oeste. El incienso, a diferencia de otros elementos mágicos, no requiere de grandes altares ni de acompañamientos especiales, ya que contiene en sí mismo la fuerza de los cuatro elementos mágicos, de los cuatro Lazos Espirituales.

Por supuesto, si el operador lo desea, puede hacer el altar tan sencillo o complejo como quiera, dejándolo prácticamente desnudo, o reforzándolo con toda clase de elementos relacionados con las características del incienso de mirra (es decir, con Virgo, Mercurio y los Lazos de Tierra).

Personalmente recomiendo acompañar al incienso de mirra con un vaso o copa de agua destilada, y con un puñado de tierra virgen contenida en un plato de madera.

Centro energético

El incienso de mirra se encuentra especialmente vinculado con el centro energético situado a lo largo de la columna vertebral, y que se mueve hacia arriba y hacia abajo, ya sea quemando o dando una sensación de escalofrío, partiendo de las lumbares.

Este punto energético libera una gran cantidad de energía y abre las puertas de la recepción y la emisión de mensajes con otros planos y otras realidades, uniendo al mundo material con el mundo espiritual en franca y abierta comunicación.

Gracias a esta unión, el incienso de mirra se extiende por varios planos de conciencia y es capaz de llegar hasta sitios insospechados en busca de ayuda y protección, y dando la oportunidad de acceder a otros niveles aunque se tengan los pies bien puestos en tierra.

RITUAL

• Solicitar protección divina y espiritual.

• Solicitar permiso para abrir los planos de la

esencia.

• Colocar el incienso de mirra sobre un soporte de madera.

• Orientar el incienso de mirra hacia el Oeste.

• Encenderlo a primera hora de la tarde (los días miércoles y durante el verano tiene mayor potencia) y dejarlo encendido hasta que se consuma.

• Hacer los ejercicios de respiración una vez como preparación.

• Meditar sobre lo que se desea.

• Proyectar mentalmente la situación ideal del deseo.

• Proyectar el pensamiento junto al color verde

intenso.

• Repetir cuatro veces los ejercicios de respiración.

• Cerrar mentalmente los planos de la esencia.

• Agradecer la protección divina y espiritual, y despedirse.

Respiraciones

— Extender las manos por los costados y unir los dedos índice, pulgar y corazón de cada mano.

— Respirar profundamente en seis tiempos.

— Mantener este aire dentro del cuerpo durante seis tiempos.

— Soltar el aire con fuerza en seis tiempos.

Meditación

Centrar el pensamiento en el centro energético situado a lo largo de la columna vertebral, partiendo de las lumbares, y meditar sobre lo que se quiere y sobre lo que se desea, sopesando los pros y los contras de dichos deseos, asumiendo la responsabilidad de la consecución de los mismos.

Proyección

Una vez que se haya meditado larga y profundamente sobre lo que se desea y asumiendo la responsabilidad de su consecución, proyectar el pensamiento y el deseo sobre la persona, área de la vida o asunto, y recrearlo mentalmente de una forma ideal, como si estuviéramos viendo en una pantalla de cine la consecución del deseo, y mantener esta imagen por lo menos durante siete segundos una vez que la imagen sea clara en la mente.

Fijar la fuerza del deseo en la columna vertebral y llenar la mente de un color verde intenso.

Repetir durante siete días seguidos el ritual, en este caso de miércoles a martes, y esperar los resultados sin empecinamiento ni obsesiones.